Feliz tiempo de consumismo, de rostros tristes y perdidos. No siempre la navidad y el año nuevo vienen acompañados de esa especial sensacion de dicha y prosperidad. Todo lo contrario. Navidad paso como una rafaga, hacer, hacer, hacer..... sin villancicos, empachada por tanto chocolate y con sentimientos encontrados.
La etapa de los regalos no se si fue un capitulo feliz u otro más sin sentido. Con culpa por quererlo todo, pero finalmente entrar a las tiendas ver y ver y salir con las manos vacías porque no quiero ser consumista. ¿Podría ser que eso me hiciera mas dichosa?. Feliz de hacer pequeños obsequios a la gente que me importa, un detalle por asi decirlo. Caos total.
Y asi ha pasado de lugar en lugar, viajando y viajando, y pocas son las horas de descanzo real. Ya se termina este periodo de locura emocional, volvere a mi rutina, a mi tranquilidad.
Feliz año nuevo.
Del satélite de
Venus
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